VIVE LA NAVIDAD 2010: visita el nacimiento de la Comunidad de Madrid

Dado que vivo en Madrid, desde hace ya más de 30 años, me considero una madrileña más, por eso te recomiendo visitar este nacimiento que es el que tiene mayor público de la capital. De todas formas cada ciudad tiene sus nacimientos y es el momento de acercarnos a esta tradición y a su historia. ¿Te apuntas?

El belén de la Comunidad de Madrid, emplazado en la Real Casa de Correos, sede de la Presidencia regional, puede ser visitado hasta el próximo 7 de enero, de lunes a domingo, desde las 10:00 hasta las 21:00 horas. El 1 de enero será el único festivo en que permanecerá cerrado. Cada año es instalado por la Asociación de Belenistas de Madrid.

El acceso para visitantes se realizará desde la calle San Ricardo, justo detrás del edificio de la Real Casa de Correos. Éste es el nacimiento más visitado en la ciudad de Madrid; de 2005 a 2007, el número de visitantes superó las 250.000 personas. Este año, el belén tiene como novedad la posibilidad de ser transitable para el público. Yo he ido ya dos veces a verlo, es como una tradición en nuestras navidades, recorrer la Puerta del Sol, el mercadillo de la Plaza Mayor y visitar algunos de los Nacimientos de Madrid. El de la Comunidad nos ha parecido siempre de los más completos.

Artesano y natural
Es un diseño de gran realismo que pesa más de dos toneladas y media, en el que destaca el entramado de madera, corcho, musgo y productos naturales. Está compuesto por más de 500 figuras realizadas artesanalmente con gran detalle, a mano, en barro cocido y policromada una a una. Todas ellas son obra del imaginero belenista José Luis Mayo Lebrija, asesor artístico de la Asociación. Además, cuenta con un centenar de edificaciones a escala que ocupan una superficie de 150 m2.

En su diseño e instalación se han invertido unas 2.500 horas de trabajo y la participación altruista de 45 personas. Para el montaje se han utilizado 1.600 kilos de corcho, 160 m2 de musgo natural, 500 kgs de arena de río y de otros tipos, 30 kgs de gravilla, además de 10.000 tornillos para ensamblar el montaje.

Las escenas que componen el nacimiento están basadas en los pasajes bíblicos del Nuevo Testamento, como la Natividad y la Anunciación a María, el Castillo de Herodes, una cabalgata de los Reyes Magos como símbolo de la Epifanía del Señor y diversas escenas cotidianas del pueblo de Belén. Además, incorpora cuatro reproducciones de La Adoración de los Reyes Magos pertenecientes a los fondos del Museo de El Prado con motivo de la celebración del Año Internacional de la Astronomía de 2009.

El Belén en Madrid, en España y en el Mundo

La historia del Nacimiento y de todos los hechos que representa, como la anunciación a los pastores o la adoración de los Reyes Magos, son escenas que tradicionalmente se representan en el arte del belenismo.
-Si echamos un vistazo a la historia, nos remontaríamos al siglo II, ya que se tienen datos de la adaptación al Nacimiento en las representaciones de la Catacumba de Sta Priscila, en la que aparecía por primera vez la Virgen con el Niño en brazos y a su lado el profeta Isaías apuntando con el dedo hacia una estrella.
-Más tarde, en el siglo XIII, Francisco de Asís, tras su peregrinación a los Santos Lugares, celebró la Eucaristía en la Nochebuena de 1223 en una cueva del pueblo italiano de Greccio. En ella preparó una representación viviente de un establo con la Virgen, San José y el niño Jesús, que incluía ya una mula y el buey. Esta representación, es justo la que se considera el origen del belenismo. Desde Greccio hasta nuestros días, a lo largo de toda la Historia del Arte, el belenismo y sus representaciones han sido capaces de igualar a todas las clases sociales, desde la nobleza al pueblo llano pasando por la iglesia.

En España: siglo XV

En nuestro país el Belén lo introdujo la orden franciscana en el siglo XV. Veamos algunos de los más interesantes:

– Del siglo XVI todavía se conserva el Belén de Coral en el Monasterio de las Descalzas Reales de Madrid. Todas las figuras están talladas en coral, plata y bronce. Se desconoce su autor o autores.
– Conocemos en nombre de algunos autores como Martínez Montañés o Luisa Roldán, «La Roldana», que en el siglo XVII contribuyeron con sus obras al auge que posteriormente tomaría la instalación de belenes.
El rey Carlos III, que había hecho del nacimiento una isntitución nacional en Italia reinando en Nápoles, introdujo el arte del belenismo en España y de forma especial en su capital, constituyendo un nacimiento con más de cinco mil figuras, conocido como «El belén del príncipe», para su hijo Carlos IV. Todavía se conservan muchas figuras de este nacimiento en el Palacio Real.
– Al igual que en Italia, el belén también arraigó en las costumbres populares. En el siglo XVIII destaca el imaginero murciano Francisco Salzillo, por sus aportaciones al belenismo en España. De este autor se conserva un monumental belén encargado por el Marqués de Riquelme, con más de 900 figuras, casi completo, en el Museo Salzillo de Murcia.
– En la actualidad existen grandes imagineros en España, como José Luís Mayo, Martín Castells y Martí, Nicolás Almansa, los hermanos Griñán, Serrano, Amo, Guillén, Galán, Decorarte, José Miranda, Jesús Jiménez, continuador de la escuela barroca granadina de su abuelo Rada, Pedro Ramírez Pazos…

De ricos y pobres

La costumbre del montaje del belén no se extendería a los hogares españoles y madrileños hasta bien entrado el siglo XIX, en pleno romanticismo. Los belenes se convirtieron en pequeños oratorios festivos en torno a los cuales se reunían las familias, con panderetas y zambombas en mano, el villancico en la voz, el movimiento en la danza y la alegría en los corazones.
Lógicamente, los belenes de grandes proporciones y de figuras de calidad fueron patrimonio de las clases más acomodadas e instituciones religiosas y se compraban por encargo, a los principales artistas. Por su parte las figuras más sencillas se podían comprar en mercadillos (en la actualidad, en Madrid, el más famoso es el de la Plaza Mayor) y tiendas, venidas desde tierras murcianas o granadinas.

En el siglo XX, fueron apareciendo en el mercado las figuras de Olot, emparentadas con el historicismo y el orientalismo. Éstas han convivido a lo largo de nuestra Historia reciente con las tradicionales, que seguían reflejando en sus tipos a los hombres y mujeres de las diferentes comarcas, ataviados con sus trajes típicos y portadoras de sus utensilios de trabajo.

Actulmente, el belenismo y las asociaciones que le dan forma tiene por objetivo llevar a la sociedad el Nacimiento, no quiere ser maquetismo, si no cumplir una labor social y evangelizadora dentro de un mundo en el que están desapareciendo los valores tradicionales que le dan forma. Por ello, esta tradición tan madrileña, tan española, tan nuestra, es importante que permanezca siempre en el recuerdo, en el presente y en el futuro, de esta manera, podremos hacer de la Navidad… Navidad.

Otros nacimientos

¿Un consejo? No te lo pierdas. Nosotros (me refiero a mi familia, mis dos hijos y mi marido) seguro que volveremos una vez más a verlo. También merece la pena visitar el de la catedral de la Almudena (con bonitos efectos de luz y sonido). Y nos hemos propuesto conocer los del Palacio Real y el del monasterio de las Descalzas Reales. Sin duda muy interesantes.

Por otra parte, también hemos disfrutado contemplado belenes en otros países como por ejemplo en Portugal, en la bonita ciudad de Óbidos (una fortaleza medieval donde celebran la ciudad de la Navidad, ideal para ir con niños: con nieve artificial, pista de patinaje, Papá Noel, disfraces, chuches, trineo…). En una iglesia de Óbidos vimos también hace ya tres años una exposición de belenes portugueses de distintos estilos (arriba, fotografía de la izquierda) e incluso un belén comestible, hecho de dulces (a la derecha en la fotografía).

Otros belenes que hemos tenido oportunidad de conocer son los de Roma, dado que hace dos años visitamos esta ciudad días antes de Navidad. En Roma en muchos belenes (no en todos) no ponen el Niño Jesús hasta después del día 24 de diciembre. La cuna permanece vacía, como por ejemplo vimos en en belen de la Basílica de San Pablo Extramuros (en la fotografía de la izquierda). Tampoco tenía el Niño Jesús el belén que contemplamos en la bonita iglesia de Santa Araceli (repleta de lámparas de lágrimas de cristal y a la que se accede tras subir una gran escalinata, el guía nos contaba que las mujeres que desean un embarazo suben las escaleras con fe, algunas incluso de rodillas). Podemos ver una imagen de este Nacimiento al final del texto (en la última fotografía).

Otros nacimientos que vimos en Roma sí tenían el Niño Jesús como por ejemplo el que contemplamos en el Panteón de Agripa, un templo circular construido a principios del imperio romano y dedicado a todos los dioses. Hoy el Panteón, conocido como La Rotonda, es un lugar de culto cristiano: la iglesia de Santa María de los Mártires. En él reposan los restos mortales del rey Victor Manuel II, de su hijo Humberto y de su esposa Margarita. En 2008 vimos un bonito Nacimiento de tamaño gigante, que sí incluía el Niño Jesús. Nos hemos enterado que en este año, 2010 también tienen un Nacimiento de grandes proporciones, de origen alemán. Veinte años después de la caída del muro de Berlín un pesebre de la ciudad de Zwickau (Sajonia, Alemania), compuesto por estatuas de madera del artista Jo Harbot, se expone en el Panteón, en pleno centro de Roma, justo en el corazón de lo que en la actualidad es una iglesia católica.

Esta muestra inusual es obra de protestante y descendiente de Lutero: el protestante es Wilhelm Staudacher, director de la oficina romana de la fundación alemana “Konrad Adenauer”. Sin duda será una inmejorable publicidad para la región alemana. Y tiene también un trasfondo político: el pesebre recordará tanto a romanos como a turistas la caída del muro de Berlín, 20 años atrás, y lo harán a su modo. “La gente de aquí entiende bien el lenguaje de un pesebre” opinaba Staudacher; “durante el Adviento, van de iglesia en iglesia a ver los pesebres.” En muchos lugares de España todavía perdura la tradición de visitar belenes en Navidad. La cercanía del Panteón al mercado de Navidad de Piazza Navona, favorecerá a las visitas del pesebre más grande de toda Sajonia. El conjunto de estatuas, que pesan unas 10 toneladas cada una, fue inaugurado el 5 de diciembre de 2010 en el Panteón y se podrá visitar hasta el 2 de febrero de 2011.

Otro Naciemiento que llamó nuestra atención es el de la bulliciosa Plaza de España, muy costumbrista, muy italiano, que incluía hasta una heladería al lado del establo. Este también representa todo el misterio, con el Niño Jesús incluido. En la fotografía de la derecha, el Nacimiento de la Plaza que lleva el nombre de nuestro país , adornado con abundantes flores de Pascua, un lugar en el que la gente joven queda con sus amigos, un punto de encuentro, muy bullicioso y lleno de vida.

Seas de la ciudad que sea (en Toledo por ejemplo tienes un Nacimiento de tamaño natural en la plaza de Zocodover, y otro también de tamaño natural en una de las puertas de la catedral), no te pierdas visitar con tu familia, con tus hijos, los nacimientos más significativos. Y si viajas fuera, haz lo mismo. ¡Disfruta la Navidad! y mantén viva esta bonita tradición cristiana. Abajo, en la fotografía de la izquierda el Nacimiento de la iglesia de Santa Araceli (como te comentábamos antes), sin el Niño Jesús todavía.

En la Navidad pasada fuimos a conocer un nacimiento en Denia, el de la Iglesia de San Antonio, muy elemental y sencillo, hecho de recortables (sí, sí, de recortables de papel pintados a mano) por los niños que van a hacer la Primera Comunión. Todos y cada uno de los nacimientos que hemos visitado tienen su encanto. Espero que alguien se anime y nos cuente en primera persona su experiencia, que nos recomiende alguno que no conozcamos y nos diga por qué le ha encantado. ¡Feliz Navidad!

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Belenes de Madrid Navidad 2012


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